Libertad Emocional Por Medio del Perdón

El perdonar es la acción más liberadora del ser humano hacia sí mismo y hacia los demás que en algún momento de la vida hirieron o lastimaron. El perdón es elegir amar, tener paz, gozo, esperanza, libertad, alegría, entusiasmo, entre tantas emociones de bienestar. Cuando se elige no perdonar destruimos la vida atándose a una cárcel emocional de tormentos. La falta de perdón trae amargura, odio, coraje, crítica, negativismo, sed de venganza, mal humor constante, víctima (tú no me entiendes porque no pasaste lo mismo) sufrimiento, tristeza, celos entre otros pensamientos y emociones tóxica que destruyen y te encarcelan dejando de vivir la vida que Dios tiene preparada para ti. 

 

La palabra dice: Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes, afirma el Señor, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza. Jeremías 29:11. Para que el plan de Dios se cumpla en tu vida, unos de los pasos para llegar al propósito que Dios tiene para ti, es perdonar. ¿Que es perdonar? El perdón es el acto de disculpar a un ofensor, sin guardarle resentimiento debido a su ofensa y renunciar a todo pensamiento de recompensa a través de querer venganza o hacerle daño a la persona que ofendió o te lastimó en algún momento de tu vida. La palabra perdón en griego que se traduce “perdonar” significa “dejar pasar”. Que difícil dejar pasar una ofensa, una conducta o un acto que te lastime. Dios en su palabra nos dice, porque si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial. Mateo 6:1, No juzguen, y no se les juzgará. No condenen, y no se les condenará. Perdonen, y se les perdonará, Lucas 6:37.  No se tú, pero vivir sin el perdón de Dios es la destrucción total de nuestras vidas. Por muchos años en mi vida, tenía la falta de perdón, creía que todo estaba bien, asistía a la iglesia, servía, no le hacía daño a nadie, pero tenía una raíz de amargura por la falta de perdón. El Espíritu Santo me mostró que tenía que ser libre en esa área de mi vida para alcanzar las riquezas que Dios tenía para mí. Cuando elegí perdonar, solté mis cargas, me liberé de la atadura de la falta de perdón y mi vida se transformó totalmente.  No olvides el perdón hace la diferencia entre el tormento y los sufrimientos continuos, entre la liberación y la redención. La fe me mueve, pero el perdón desata poder. 

 

Uno no puede estar en armonía con el Creador sin perdonar a los demás. No olvidemos el perdón es una decisión únicamente Tuya, cada persona tiene la decisión en sus manos de perdonar y ser libre de la cárcel del sufrimiento, amargura, odio, resentimiento, coraje, frustración, venganza y ansiedad. Te invito a que seas libre por medio del perdón, amor, misericordia, esperanza y fe de Dios. No olvides la justicia la da Dios. Comienza a soltar todo aquello que te ata a la falta de perdón, ama conscientemente, y entrega tu vida completa a tu Dios. 

pscarlos